Tapa tu Kulo Gordo

Tapa tu Kulo Gordo es el sexto tema de nuestro tercer álbum, Warreando por la Dehesa, y trata un tema de lo más mundano.

Esto es algo que, seguro, nos ha pasado a todos. Estás tranquilamente sentado en un bar, tomándote una cervecita fresquita con tus amiguitos, y entra un payo, normalmente muy pasado de peso, que, al sentarse el la silla, enseña medio culo, con su raja y sus pelos sudorosos. Acostumbra a pasar que, además, se sienta en un lugar en que te ofrece esa nauseabunda visión en todo su esplendor, jodiéndote el momento de relajo e impidiéndote, desde ese mismo instante, la práctica del hedonismo de forma completamente placentera.

Una visión como ésta es capaz de joder el momento más agradable. No hay camiseta que tape eso.

Uno entiende que hay situaciones en la vida en que no le queda más remedio que apechugar con los culos gordos, peludos y sudorosos que le saltan a la vista. ¡Qué remedio! Pero es del todo inadmisible que, cuando uno está disfrutando de una agradable velada en buena compañía, se la echen a perder con semejante espectáculo.

A menudo, el exhibicionista, percatándose de su “descuido”, trata de tapar sus vergüenzas estirando la camiseta que lleva puesta – normalmente de rollo friqui. Es cierto que los nuevos tejidos de hoy en día permiten estirarlos hasta límites insospechados. Pero esa no es una solución, ni mucho menos, definitiva. Tan sólo es un parche momentáneo. Los materiales elásticos tienden a recuperar su forma al cesar la fuerza que los deforma, lo que deriva, irremisiblemente, en el redescubrimiento del nauseabundo trasero gigante.

Musicalmente, Punk-Rock con toques a los Black Flag de la última época con Henry Rollins. La jocosa introducción desemboca en un torrente de gritos cargados de odio e indignación. Los riffs de guitarra con reminiscencias pop hacen las veces de contrapunto al  aire Hardcore del resto del tema.

¡A disfrutar!

¡Oink, oink!

Tapa Tu Kulo Gordo

Los presos maricones
enseñan la rabadilla
mostrando a todo el mundo
su predisposición
a agacharse en las duchas
ofreciendo su culo
simulando el extravío
de su pastilla de jabón.

Puedo tolerar
que me enseñe su hucha
un mecánico
en su taller.

Puedo tolerar
que me enseñe su hucha
un fontanero
en su quehacer.

Pero no tolero
que, estando en un bar,
me enseñe su trasero
un gordo de mierda.
Por mucho que estires
esa camiseta
no podrá tapar
tu gran culo peludo.

Puedo tolerar
que me enseñe su hucha
un albañil
en una obra.

Puedo tolerar
que me enseñe su hucha
un jardinero
plantando semillas.

Pero no tolero
que, estando en un bar,
me enseñe su trasero
un gordo de mierda.
Por mucho que estires
esa camiseta
no podrá tapar
tu gran culo peludo.

Me enternece mucho
ver a mi hijito
echar moneditas
en su cerdito.Me encabrona mucho
que un cerdo asqueroso
le enseñe la raja
del culo a mi niño.

 Porque no tolero
que, estando en un bar,
me enseñe su trasero
un gordo de mierda.
Por mucho que estires
esa camiseta
no podrá tapar
tu gran culo peludo.

Que ese volcán no erupcione.
Que ese trueno no estalle.
Que así se extinguieron
los denisovanos.

Que ese cañón no detone.
Que ese oleoducto no reviente.
O la Humanidad
peligro correrá.